domingo, 27 de marzo de 2011

EL SALVADOR Y SUS CAMBIOS DRASTICOS EN EL CENTRO HISTORICO DE SAN SALVADOR

Por Carlos Cruz

El pasado domingo 13 de marzo entró en vigencia el reordenamiento del transporte público, en el área del centro histórico de San Salvador, con el objetivo despejar esta zona para convertirla en un punto turístico. De una forma un tanto apresurada y sin lograr informar detalladamente a la ciudadanía de los cambios a realizarse en los recorridos de las diferentes rutas, se implemento la medida provocando un caos en los primeros días de entrada en vigencia.

Largas filas de personas se veían caminar desorientadas aun cuando un día antes se repartieron mapas con las nuevas rutas asignadas, muchos llegaron tarde a sus trabajos, otros debieron pagar pasajes extras, lo peor es que esto aun se repite a la fecha.

Pero ¿Es esta la solución idónea para un problema histórico? recordemos que cada año aumenta el número de vehículos existentes en el país, por lo que el tráfico diario se vuelve denso e ira aumentando conforme los años venideros.

Además a esta causa, tenemos el problema de la mala asignación de rutas. Y digo mala, porque era irrazonable ver como en ciertos sitios coincidían hasta 5 rutas diferentes de buses, mientras en otros, apenas una ruta daba servicio a la población.

Pero mas allá de apuntar a las rutas de los buses con el dedo como única causa de la contaminación, congestionamiento que se vivía en el centro histórico de San Salvador, NO debemos olvidar, que la dificultad del recorrido en esta zona se daba ORIGINALMENTE por las limitaciones de conducirse en las calles a causa de LAS VENTAS INFORMALES.

Da risa ver como los vendedores se apoderan cada dia mas de las calles ahora intransitables por las unidades del transporte público. ¿Pero qué provocó este cambio tan repentino? Una causa podría ser la reciente visita del presidente de Estados Unidos, Barack Obama. 

Otra podría ser el hecho que los empresarios del transporte público se encontraban entre la espada y la pared, cuando en medio de sus exigencias por mas subsidio se dieron accidentes que pusieron en tela de juicio el funcionamiento de las unidades de transporte a nivel nacional y lo justo de asignarles o no el aumento que querían.

Cual fue la causa real de este reordenamiento tan insólito y espontaneo no viene al caso ya. Lo importante es dar a conocer los problemas que han acontecido desde su entrada en vigencia.

1- Por el momento algunas personas aun no conocen las nuevos recorridos y andan como almas en pena desorientadas y pidiendo ayuda.

2- Económicamente algunas personas deben pagar más para conducirse a su trabajo o centro de estudios.

3- Algunas personas han tenido que ajustar su tiempo, tras tener que caminar varias cuadras para abordar las rutas de buses, otras por que el recorrido de los buses en lugar de acortarse y ser más óptimos se han alargado y complicado.

4- Las vendedores se empiezan a apoderarse de las calles como lo hicieron en su momento con varias calles del centro histórico.

5- Por el momento la presencia policial hace cumplir el no llevar las puertas abiertas durante el recorrido y parar únicamente en las paradas asignadas, PERO, cuando no hay presencia de la PNC, los transportistas vuelven a la normalidad, buses topados con puertas abiertas y parando donde se les da la gana.

6- Algunas rutas se han visto amenazas con la ubicación cercana de paradas únicas, como el caso de la ruta 17 que conduce a Panchimalco, quien enfrente de su punto de microbuses ve limitada su salida, pues enfrente paran las rutas 26, 11, A, 22, 10 entre otras.

Sin embargo algunas personas se han visto beneficiadas con este reordenamiento, esperemos este cambio sea real y no salgan mas adelante con que se vuelve todo a como estaba antes. Esperemos se haga un reajuste completo, porque rutas como la 11, 34 y 42 aún continúan con su recorrido normal en el centro histórico, "todos en la cama o todos en el suelo" digo yo aunque a muchos les moleste.

Solo diré que el bien de unos es el mal de otros y eso así es y seguirá siendo en la vida.

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