TRANSPORTE PÚBLICO DE EL SALVADOR

Por Carlos Cruz

Es trágico para mi referirme al accidente que ha enlutado a un gran número de familias salvadoreñas quienes perdieron la vida de sus familiares en el múltiple choque que ocurrió este 21 de febrero en el kilometro 42 que dé del municipio de Santa Ana conduce al de San Salvador.

Mucho se dice y se comenta, acerca de que o quienes provocaron el accidente. Lo que sí es seguro que cada quien tiene su parte. Empresarios del Transporte público, Vice Ministerio de Transporte, Gobierno y los señores motoristas no se escapan de cierto grado de culpa.

Los señores empresarios se han dedicado a llorar sus penas aquí y allá. "No nos alcanza para seguir trabajando la tarifa actual"... Umm, solo diré que tengo mis dudas, pues si algo no es sostenible lo dejas y ya. Para exigir aumento al subsidio, se apuntan ellos solos.

Pero, ¿Dónde queda el compromiso con mejorar la calidad del servicio y renovar las unidades ya obsoletas? Entonces recordamos que hace años, el gobierno exigió la renovación de las unidades colectivas. Esto con el objetivo de sacar de circulación aquellas que estaban en malas condiciones físicas por antigüedad.

El Gobierno permitió que estas unidades siguieran trabajando mediante un amparo. Esta acción se debió a los lamentos de los Empresarios del sector transporte, quienes manifestaron la incapacidad de renovar sus flotillas. En lugar de exigir la salida de estos fósiles que atentan contra los usuarios, les ha subido el subsidio en ocasiones anteriores.

Muchas personas culpan plenamente a los señores motoristas por su irrespeto a las leyes de tránsito. De igual manera, estos actúan de forma temeraria al abusar de las capacidades físicas de las unidades de transporte. Basta observar un día cualquiera como las personas van casi colgadas de las puertas de los autobuses, aun cuando esto es un delito según las leyes de tránsito de El Salvador.

Por lo tanto, el Vice Ministerio tiene su parte por mantener hasta la fecha una actitud tolerante y negligente. Para otorgar la licencia debería aplicarse mayores requisitos, además de aplicar mano dura a todos aquellos infractores de las leyes viales. Más de alguno estará enojado con estas palabras, pero el fin justifica los medios.

Nada ni nadie niega que este accidente ha creado polémica no solo por el hecho del saldo fatal. A esto se suma la negociación que sostiene el Gobierno salvadoreño con los empresarios del transporte público para asignar un aumento al subsidio.