viernes, 18 de febrero de 2011

SER O NO SER, ESE ES EL DILEMA

Por Carlos Cruz

La semana pasada fui invitado a un taller de educación sexual donde se habló de las preferencias sexuales, pero, me percaté que éstas están ligadas a la expresión del amor y a la personalidad que el ser humano presenta, además ese mismo día presencie la agresión física y verbal de una persona homosexual por el simple hecho de ser públicamente quien realmente es.

"Ser o no ser... ese es el dilema" es una frase que muchos conocen a través de la obra "Hamlet" de William Shakespeare, que al aplicarlo a nuestra vida diaria se vuelve muy compleja, pues nos referimos directamente a la personalidad.

La personalidad es un constructo psicológico, con el que nos referimos a un conjunto dinámico de características de una persona. Pero nunca al conjunto de características físicas o genéticas que determinan a un individuo, es su organizacion interior la que nos hace actuar de manera diferente ante una o varias circunstancias.

Eso quiere decir que cada uno de nosotros es diferente, pero, ¿Qué tanta es la diferencia que existe entre las personas? Todos respiramos, bebemos, comemos, dormimos, y amamos, esto último presenta variantes en la sociedad, pero, al final todos llegamos a conocer el significado de la palabra "amor".

Heterosexual, homosexual y bisexual son categorías que identifican la forma en que las personas viven este sentimiento, acá se debe tener cuidado porque muchos se dejan ir por el sexo explicito, como si el ser humano fuera una bestia adicta a la fornicación, algunos puede que lo sean pero no debemos generalizar.

Sin embargo nuestra sociedad está llena de intolerancia, inmadurez, mediocridad e hipocresía a más no poder, donde los presuntos Heterosexuales han dominado el panorama haciendo ver a las otras dos expresiones del ser humano (homosexual y bisexual), como fenómenos aberrantes a los cuales hay que exterminar de la faz de la tierra para garantizar el buen funcionamiento del mundo.

Los valientes que se atreven a demostrar públicamente su forma de amar y preferencias sexuales, se enfrentan a una multitud que les ofende, los margina y en muchos casos atenta físicamente contra ellos simplemente por el hecho de ser diferentes a los que presumen de ser normales.

Pero no toda la sociedad es intolerante, muchos demuestran madurez al aceptar las diversidades de la personalidad social. Es por ello que ahora cualquiera tiene la libertad de declararse homosexual o bisexual si se le da la gana, pues no tiene temor a ser castigado por la leyes.

Siempre existirán argumentos como los de la iglesia católica y mentalidades ortodoxas en contra de estas manifestaciones de amor y sus logros alcanzados en la historia actual cuyo mayor emblema es el matrimonio o unión legal gay. Holanda fue el primer país en legalizarlo, en 2001. Además, le siguen Bélgica, España, Canadá, Sudáfrica, Noruega y Suecia. Portugal e Islandia se sumaron este año a la lista. 

En el caso de los Estados Unidos, en algunos estados tiene validez esta unión. Fue aprobado en Massachusetts, Connecticut, Vermont, New Hampshire y Washington. Algo similar a esta aprobación ocurrió en Hungría, Israel, Luxemburgo, Nueva Zelanda, Reino Unido, República Checa y Suiza. 

La diferencia es que en estos lugares no se lo denominó matrimonio, ni se le dio la entidad de tal. Se lo denominó unión civil al igual que en Francia, Uruguay y Colombia. Desde la persona mas humilde hasta el personaje mas conocido del espectáculo puede vivir una doble vida, basada en una personalidad determinada por el entorno laboral y social donde vive.

A esto debemos agregar los casos recientes de México y Argentina donde ya se dan este tipo de uniones legales. Pese a esto muchos heterosexuales de apariencia tienen temor a mostrar su verdadera careta de homosexuales por la discriminación y los prejuicios a los que serán sometidos por el hecho de ser "diferentes".


Basta ya de obligar a las personas a vivir una doble moral, si en la realidad sabemos que las personas homosexuales y bisexuales se encuentran en áreas como la salud, la economía, la enseñanza, la política y muchas mas. Y ni cuenta nos damos ya que el hecho que su forma de amar no sea la del heterosexual ,mal llamado normal, no los hace diferentes de como somos ustedes y yo.

Como diría un conocido antes de criticar a los demás desnúdate y mírate frente a un espejo y observa todos tus defectos, que de seguro mas de uno serán. Porque somos humanos y recordemos que el único perfecto es Dios, quien dijo "ama a tu prójimo como a ti mismo" y mas aun "el respeto al derecho ajeno es la paz"




2 comentarios:

  1. Un tema bastante polémico en nuestro medio, que en ciertos aspectos aún me cuesta abordar, pero como dices la base está en el respeto como premisa fundamental...

    No creo que tenga nada que ver con la "normalidad", en este mundo todo es relativo y la experiencia nos lo muestra. Ya no caben más pensamientos de corte cerrado, hay que ser más empáticos, aunque cueste. =)

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  2. Una lastima que siga la DIVISION, y discrimacion de las personas sobre estos puntos, tan personales, tan ìntimos, tan sensibles. Una làstima que lleguemos al extremo de utilizar el nombre del propio CRISTO, para SEGUIR ABORRECIENDONOS LOS UNOS A LOS OTROS.

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